Novatadas que las veteranas de las residencias hacen a las de primer añoChicas en pijama o en albornoz recorren estos días las calles más céntricas de la ciudad de Salamanca. Algunas con la cara pintada, otras con pelucas y casi todas en zapatillas de estar en casa. Se trata de las novatadas que las chicas más veteranas de las residencias hacen a las que llegan a estudiar su primer año a la capital charra. Novatadas simpáticas que huyen de las bromas más pesadas.Estos primeros días de curso la Plaza Mayor y las calles peatonales de la ciudad se llenan de grupos de chicas que dirigidas por las veteranas tienen que ir superando pruebas. Hacer la conga, cantar canciones en defensa de su residencia, simular que reman con una barca imaginaria en medio de la plaza salmantina o pasarse manzanas de boca en boca intentando que no se caiga al suelo son algunas de las pruebas.
Lo que hace subir los decibelios es cuando se cruzan dos grupos de distintas residencias. Eso parece una auténtica guerra. Los grupos se "enfrentan" en una batalla de cánticos a favor de cada "resi". Pero ahí no acaba la cosa. Y es que las chicas ahora tienen nuevos contrincantes. Se trata de grupos de chicos pertenecientes a residencias universitarias o que simplemente pasan por ahí que también quieren ganar esta batalla musical y festiva.A decir verdad, la mayoría de estos chicos más que ganar la guerra de cánticos pretenden conseguir los teléfonos de las chicas para irse conociendo durante el curso.
Estas pruebas son las más graciosas pero hay alguna que hace enrojecer más a las chicas. Por ejemplo, una de las pruebas más populares es hacer subir a las novatas a un banco del ágora charra y explicar a todos los viandantes, que miran con una cara de incredulidad tremenda, como se pone un tampax. Además, hay pruebas en las que las chicas deben realizar monólogos improvisados. El tema y el lugar donde realizarlo, por ejemplo en lo alto de una farola de la Plaza Mayor, lo asignan las veteranas.
Otra de las bromas más repetidas en esta época es la del atracar distintos establecimientos con un arma de alta potencia: un secador. Es de las escenas más graciosas. Las chicas deben entrar en tiendas y simular un atraco con un secador de pelo como única arma. Cierren los ojos e imaginen que estando en una tienda entra una veintena de chicas en pijama y con un secador en la mano y les intentan atracar.
Las novatadas más allá de ser traumáticas consiguen que estos primeros días de curso en los que las nuevas universitarias aun tienen la morriña de su familia y amigos se pasen de manera divertida. Además, las participantes reconocen que es una oportunidad también para irse conociendo y establecer las primeras amistades.
Lo peor será cuando llegue el próximo 29 de septiembre y hayan quedado atrás los cánticos y los disfraces de esta primera semana y tengan que comenzar a estudiar.
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Contenido original de www.tevibonita.com, si realizará alguna copia respetar al autor consediendole un enlace. Chicas
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